En medio de la polémica y la censura, la película ‘Sound of Freedom’ ha sido vetada por las plataformas Disney y Netflix. La película cuenta una historia real sobre el drama del tráfico de niños y la pederastia, en la cual un agente federal renuncia a su trabajo para rescatar a niños de manos de traficantes.
A pesar de su éxito en taquilla, la película ha sido objeto de controversia e incluso censurada. Esto ha generado revuelo entre los activistas LGBTQ+, quienes argumentan que la película promueve una narrativa dañina y estigmatizante.
En España, la prohibición de ‘Sound of Freedom’ ha avivado el debate sobre la normalización de la pedofilia. Las declaraciones de la ministra de Igualdad, Irene Montero, en 2002 han sido señaladas como un primer paso hacia esta tendencia. Montero afirmó que ‘todos los niños tienen derecho a conocer su cuerpo y a que no los toquen SI ELLOS NO QUIEREN’. Además, se ha propuesto cambiar el término ‘pedófilo’ por ‘MAP’ (persona atraída por menores).
Este debate trasciende las divisiones políticas tradicionales y plantea cuestionamientos acerca de la supresión de la familia y la erradicación de la paternidad. En Andalucía, los Centros de Menores están regidos por asociaciones cuyo objetivo es la ‘eliminación del heteropatriarcado’.
La censura de ‘Sound of Freedom’ es solo una advertencia de las tendencias sexuales que podrían convertirse en ortodoxas en un futuro cercano. Las plataformas LGTBQ+ se han convertido en consecuencia de este movimiento.